Los anillos de compromiso y matrimonio deben ser elegidos no sólo por su belleza, sino por el valor sentimental que representarán.
Un evento tan especial como el matrimonio hay toda clase de mitos y tradiciones que van desde la organización que ha de seguirse hasta lo que debe usar una novia ese día. Algo viejo, nuevo, prestado y azul es una de las clásicas tradiciones que las novias han seguido a lo largo de la historia, como también han seguido muy de cerca las historias que, sobre los anillos de boda, han nacido en las más diversas sociedades.
Los anillos de matrimonio son más que un mero accesorio de bodas, tienen una carga sentimental muy fuerte de manera tal que puede ser símbolo para toda una familia y para su descendencia.
Hay algunas de las más bellas tradiciones sobre los anillos de boda para se presentan a continuación para que sepan elegir y apreciar más estas maravillosas joyas.
Perspectiva asiática
Para los chinos el dedo en que deben ir los anillos de matrimonio es el dedo anular. Según estos cada dedo tiene un significado: el meñique representa a la descendencia es decir a los hijos; el anular, a la pareja; el dedo corazón, al yo propio; el índice representa a los amigos y familiares más cercanos como hermanos, primos y tíos; y el pulgar, a los padres.
Al ser el dedo anular el que representa a la pareja el anillo debe estar en este dedo, además si unimos todos los dedos e intentamos separar el dedo corazón (que nos representa a nosotros mismos) del dedo anular cuesta gran trabajo; y es sencillamente porque es muy difícil apartar de nosotros a la persona que intensamente amamos.
Egipcios y anillos de compromiso
Los anillos de compromiso tienen una de las más antiguas tradiciones que se remonta a más de 4 mil años, concretamente a la época de los egipcios.
Los antiguos egipcios se hacían anillos de tallos retorcidos de plantas que estaba destinados a simbolizar el amor eterno. Tanto egipcios como romanos, colocaban el anillo de compromiso en el dedo anular de la mano izquierda de la mujer.
Esto se hacía por la creencia que había de una vena en el dedo anular de la mano izquierda que conectaba directamente con el corazón. Esta vena se conocía con el nombre de ”vena amoris”, o “vena del amor”.
Significando el amor puro y legítimo, por lo tanto era una prueba de amor irrefutable poner el día de la boda el anillo a la novia o novio en dicho dedo.
Perlas, una injusta concepción
Según una antigua leyenda las perlas nacen en los lagos formados por la lágrimas que derramaron Adán y Eva al ser expulsados del Paraiso. Por lo tanto será desventurada en su matrimonio aquella novia que tenga un anillo de compromiso de perlas.
Lamentablemente, se ha asociado las lágrimas con las perlas porque existe una forma de perla llamada “pera” o “lágrima”, pero es un error verlas desde esa óptica.
Las perlas blancas son las gemas que mejor combinan con el vestido de novia, además son un símbolo de elegancia y buen gusto por aquellas mujeres que las usan.
Cuál es el anillo correcto
Ante la más extensa variedad de diseños exclusivos que tienen los anillos de diseño, elegir el adecuado es una tarea complicada, pues muchos pueden verdaderamente encantarnos, pero elegirlo va más allá de escogerlo por el mero hecho de ser bonito.
Este debe tener una conexión inmediata con la novia y el novio, por ello estos pueden, una vez tomada la decisión de contraer nupcias, elegir el anillo junto a su futuro consorte.
Si el novio quiere dar una gran sorpresa y por ello desea comprar solo o con el padrino de la boda el anillo debe tener en consideración lo siguiente para poder elegir el anillo, ya sea el de boda o de compromiso, correcto: cuál es el estilo del vestido de la novia, cuáles son las demás joyas que esta usará, cuáles son los gustos de la novia en materia de joyería, qué color tiene de piel, ¿le gustan las piedras?, ¿el oro blanco, amarillo…?
Recuerda que esta joya marcará un nuevo camino en la vida de una mujer es por ello que ella merece tener el anillo adecuado.